Según datos avanzados por Cedigaz sobre los aspectos más destacados de 2007, el consumo de gas natural en Europa ha caído en 2007. Por tanto, asistimos a un freno en la expansión histórica del gas natural, situación que ya se inició en 2006. La causa principal ha sido la benignidad climática en las épocas de calefacciones (cabe recordar que el 40% del uso del gas natural en el conjunto de la Unión es el mercado doméstico-comercial).

Por todo ello no es de extrañar que algunos proyectos de licuefacción de gas se hayan ralentizado (en Qatar, Egipto o Trinidad, por ejemplo) aunque la impresión general del mercado es que está ajustado por el lado de la oferta. Tres nuevos proyectos estarán operativos en dos años: el australiano Pluto, el nuevo tren del proyecto Skidda, afectado por una explosión en 2004 y el Peru LNG. Los tres recibieron positivamente la decisión final de inversión el pasado ejercicio o a finales de 2006.

Según Cedigaz, la mejor opción para el gas natural en Europa ha estado en la generación eléctrica. Además de incrementarse el número de ciclos que están en operación, se ha asistido a un ligero retroceso del precio en euros del gas importado (7%), en contraste con el aumento del precio del carbón, que pasó de 65$/Tm en el primer trimestre, a 125$/Tm al final del año, elevación evidente, a pesar de la depreciación del dólar respecto al euro. Este incremento se explica básicamente por las limitaciones físicas de la oferta a corto plazo de esta fuente energética.

Las cifras manejadas por Eurogas en el momento de escribir estas líneas señalan que la mayor parte de los países de la Unión Europea con un sector maduro (con alta penetración en el mercado residencial) y situados en zonas frías sufrieron un retroceso en la demanda de gas.

Por ejemplo, en Francia las ventas descendieron un 3%; en Alemania el 5%; en Austria el 6,1%; en Bélgica el 0,4%; en los Países Bajos el 3,1%; en la República Checa el 6,8%; en Dinamarca el 12,2% y en Hungría un 5,7%. En otros países con un sector maduro el aumento fue escaso, como en Italia, con un avance del 0,5%, o en el Reino Unido, donde aquél alcanzó en el 1,3 %. Los países que tuvieron un mayor crecimiento de la demanda fueron Grecia (+23,9%), Lituania (+18%), Irlanda (+8,6%), Portugal (+7,4%), España (+4,3%) y Suecia (3,6%). En cuanto a Rusia, su consumo de gas creció entre un 1 y un 1,3%, algo menos que los ratios observados en los últimos años.

Por lo que respecta a Italia, que en 2007 alcanzó un consumo de unos 83 bcm, las previsiones en para el 2020 se elevan hasta 114 bcm de gas natural, de los que 53 bcm irían destinadas a generación eléctrica.

Según afirma Cedigaz en su boletín, la demanda de gas en el mercado estadounidense ha cobrado nuevo vigor debido a la caída de precios respecto a los años anteriores y por la actividad sostenida de la economía.