La producción actual de gas en Europa (EU 27 más Noruega) es de unos 265 bcm, alrededor del 8% de la producción mundial. En 2012 se ha mantenido relativamente estable, según las estimaciones de Cedigaz, gracias al repunte destacado de la producción noruega.

Noruega es el principal productor europeo, con alrededor de 110 bcm en 2012. Los Países Bajos se colocan en segundo lugar, con cerca de 80 bcm en los últimos años. El tercer productor es el Reino Unido, con cerca de 40 bcm, menos de la mitad de los niveles de hace 10 años (cuando superaba los 100 bcm).

El gas no convencional está siendo objeto de atención en Europa en dos planos: la búsqueda y la regulación. Polonia es el país que más interés y apoyo gubernamental ha mostrado en la localización de áreas de potencial explotación. El Reino Unido y algún otro país del este de Europa (que tiene en común con Polonia la alta dependencia de Rusia como un único suministrador), también han avanzado en la evaluación de sus recursos. Sin embargo, todavía no se han iniciado explotaciones a escala industrial en ningún país europeo. En España ha habido un descubrimiento destacado en tierras de Álava y se están iniciando prospecciones en diferentes lugares para evaluar la disponibilidad de este recurso.

La Comisión Europea está promoviendo estudios y grupos de trabajo que conducirían, a medio plazo, a una regulación de la actividad de explotación del gas no convencional.